El gigante del gas Shell reanudó los envíos de gas natural licuado (GNL) desde su instalación Prelude FLNG ubicada en la costa de Australia Occidental.
Una portavoz de la compañía dijo a los medios este lunes que «Los cargamentos de GNL se habían reanudado desde la instalación Prelude FLNG de Shell», agregando que el enfoque de la instalación seguía siendo ofrecer un rendimiento sostenido a largo plazo.
Según el servicio de datos de rastreo de buques de Marine Traffic, el buque Symphonic Breeze, con capacidad para 145,000cbm, partió con la primera carga de GNL que tiene como destino el terminal japonés Higashi-Oghishima.
Interrupcion de Prelude FLNG
En junio de 2019, Prelude FLNG registró su primer cargamento de GNL, sin embargo, tras apenas ocho meses de funcionamiento, el proyecto flotante, valorado en unos 13 mil millones de dólares, interrumpió sus operaciones debido a problemas registrados en sus generadores eléctricos.
La unidad flotante estuvo fuera de línea desde febrero de 2020, lo que acumuló 11 meses sin exportar ninguna carga de GNL desde que Shell reportó la interrupción.
Prelude tiene capacidad para producir 3,6 mtpa de GNL, 1,3 mtpa de condensado y 0,4 mtpa de GLP. Shell opera esta instalación, ubicada a 475 km de Broome en Australia Occidental.
Entre los accionistas de Prelude se encuentran Shell con una participación del 67,5 por ciento, Inpex de Japón con un 17,5 por ciento, Kogas de Corea del Sur del 10 por ciento, mientras que CPC de Taiwán tiene el 5 por ciento restante.
El mejor momento
La reactivación de las operaciones de Prelude FLNG ocurren en un momento en el que los precios del GNL enviado a China, Japón y Corea del Sur, han subido de mínimos históricos a máximos históricos en menos de un año y los suministros de algunos productores se han visto reducidos por mantenimientos no planificados.
El precio de referencia regional evaluado por S&P Global Platts subió a 21,453 dólares por millón de unidades térmicas británicas el viernes y se ha disparado un 42% en lo que va de 2021.
El precio del GNL es 10 veces más alto de lo que era cuando el coronavirus golpeó la demanda de petróleo y gas en abril de 2020, el punto más bajo registrado en los precios del gas a nivel mundial.