El gobierno de Bahía está tratando de atraer inversores para implementar otra terminal de regasificación de GNL en la Bahía de Todos-os-Santos, en Salvador, Brasil. La expectativa del secretario de Estado de Desarrollo Económico, Paulo Guimarães, es que el proyecto se ponga en marcha entre 2023 y 2024.
Actualmente, la Bahía de Todos los Santos alberga una terminal propiedad de Petrobras, pero que ha sida arrendada a la empresa estadounidense Excelerate Energy hasta diciembre de 2023.
«Hoy estamos tratando de traer otra terminal de regasificación aquí a la Bahía de Todos-os-Santos, para aumentar las importaciones de gas», dijo Guimarães.
Según el secretario, todavía no hay un calendario para la difusión del proceso de licitación del proyecto. Sin embargo, dijo que algunas empresas ya han expresado interés.
«Creo que a finales de este semestre se debe tomar una decisión con respecto a la implementación», dijo. «Va a ser un proyecto privado, creo que otro año, un año y un poco deberíamos tener otra terminal de regasificación aquí. Pero dependerá del sector privado implementar estos proyectos», añadió.
Demanda de gas más barato
Para el secretario, la demanda del sector industrial de un gas más barato que el vendido por Petrobras ya es suficiente para permitir una segunda terminal de GNL de Bahía.
Petrobras aumentó los precios del gas natural en un 50 % en enero, en los nuevos contratos firmados con los distribuidores, alegando la necesidad de cubrir el aumento de los costes de importación de GNL.
«Hay demanda de gas y demanda de gas más barato, algo que Petrobras no vende (…) La demanda de gas de Bahía está creciendo. De hecho, tenemos industrias que incluso han dejado de implementar nuevos proyectos debido a la falta de gas natural barato», añadió.
Según Guimarães, la entrada de nuevos proveedores de gas en el mercado brasileño es una noticia positiva para la industria.
Mencionó que el distribuidor Bahiagás, por ejemplo, ya no tiene Petrobras como principal proveedor. Desde principios de 2022, más del 70 % del volumen comprado por la empresa ha sido entregado por nuevos proveedores, y el 26 % de este gas ofrecido por el sector privado proviene de la tierra (producción terrestre) de Bahía.
Hoy en día, Bahiagás tiene un contrato de suministro con Shell, Galp y Equinor, ganadores de la convocatoria pública abierta por la empresa el año pasado, y con PetroReconcavo y Origem Energia, contratado a partir de negociaciones bilaterales.
«Varias de estas empresas que han tomado los campos [maduros] de Petrobras están invirtiendo para producir gas natural aquí», dijo Guimarães.
Se espera que la producción de nuevos operadores en Bahía crezca aún más con la venta del polo Bahia Terra, un conjunto de 28 campos a la venta por Petrobras, en las cuencas de Recôncavo y Tucano Sul. PetroReconcavo y Eneva disputan, en consorcio, la compra del activo.
Internalización del GNL en Bahía
El secretario también recordó los proyectos de internalización y expansión de la distribución de GNL en el estado, desde camiones.
El distribuidor Petrobahia, en asociación con New Fortress Energy, comenzó en abril de 2021 la comercialización de GNL en gasolineras alejadas de la red de gasoductos Bahiagás.
La propia Bahiagás también tiene planes para internalizar la red y está construyendo un gasoducto de 450 km al oeste del estado para servir a la empresa minera Magnesita.
GNL caro en el mercado internacional
Sin embargo, los planes para construir una segunda terminal de GNL en Bahía coinciden con un momento de presión sobre los precios internacionales, agravado por la guerra en Ucrania, y el consiguiente crecimiento de la demanda europea de GNL como forma de reducir la dependencia de las importaciones de gas ruso.
Guimarães cree, sin embargo, que los precios globales pueden retroceder en los próximos años.
«Cuando cesen las sanciones impuestas a Rusia y, en consecuencia, se normalice el suministro del mercado europeo y asiático, es posible que el precio del GNL vuelva a caer, aún más a la luz del uso creciente y acelerado de fuentes renovables para reemplazar las fuentes tradicionales de energía, gas, petróleo y carbón de regiones geopolíticamente inestables», comentó.
Fuente: Agência Epbr