El CEO de Shell, Ben van Beurden, dijo que la unidad de producción flotante de gas natural licuado de Australia, Prelude FLNG permanecerá cerrada durante la mayor parte del primer trimestre de 2022.
Recordemos que Shell tuvo que cerrar las instalaciones, en diciembre del año pasado, debido a un incendio y un corte de energía.
Tras el informe de resultados del cuarto trimestre de 2021, Ben van Beurden, dijo a los medios de comunicación que la empresa debe resolver cuidadosamente los problemas en las instalaciones antes del reinicio.
Según el ejecutivo, han encontrado una falla eléctrica en los sistemas de batería asociados con el sistema de alimentación ininterrumpida.
El retraso también se debe a las estrictas reglas de pandemia en Australia.
Prelude FLNG, ubicado en Browse Basin; 475 kilómetros de Broome en Australia Occidental, cuenta con una capacidad para producir 3,6 millones de toneladas anuales de GNL, además, puede producir 1,3 mtpa de condensado y 0,4 mtpa de GLP.
Debido al incendio, el regulador australiano de seguridad en alta mar, NOPSEMA, había ordenado a Shell que mantuviera cerrado a Prelude FLNG. “Se consideró que la falta de restauración de energía confiable representaba un impacto y un riesgo continuos para la salud y la seguridad del personal en la instalación”, se lee en el comunicado. Más tarde, el regulador dijo que la instalación estaba en riesgo de sufrir una “falla catastrófica”.
Sin embargo, NOPSEMA encontró que Shell “manejó apropiadamente” los riesgos inmediatos para la tripulación. El regulador no consideró el enjuiciamiento de Shell en esa etapa.
Beurden dijo que la compañía está trabajando en estrecha colaboración con NOPSEMA para solucionar los problemas.
Prelude FLNG
Shell tiene una participación total del 67,5 por ciento en la instalación. Entre los otros accionistas de Prelude FLNG se encuentran, Inpex de Japón (17,5 por ciento de participación), Kogas 10 de Corea (por ciento) y CPC de Taiwán (5 por ciento).