Las importaciones de gas natural licuado (GNL) en América del Sur alcanzaron un nivel récord en junio impulsadas por la fuerte demanda de Argentina y Brasil.
De acuerdo con los datos de S&P Global Platts las importaciones sudamericanas alcanzaron los 84 mil millones de pies cúbicos (Bcf) en junio 2021, un poco más alto que el récord anterior de 78 Bcf registrado en agosto de 2018.
Hasta ahora, las importaciones de GNL registradas hasta junio alcanzan las 263 Bcf, indicando que las importaciones de GNL en la región podrían estar en camino a ser las más altas registradas desde 2015.
Brasil
De acuerdo con el reporte de la Platts, las importaciones de GNL de Brasil alcanzan los 37 Bcf en junio, esto es casi la mitad de las importaciones totales de América del Sur registradas durante el mes de junio.
Recordemos que Brasil ha estado importando volúmenes récords de GNL debido a una sequía severa que ha llevado a los niveles de los embalses hidroeléctricos a registrar niveles críticos.
Los datos más recientes del regulador de electricidad de Brasil, ONS, muestran que los niveles de los embalses en el sureste y el medio oeste del país, las regiones con la mayor capacidad de generación hidroeléctrica, ha venido disminuyendo constantemente desde los niveles ya bajos desde marzo 2021.
Para julio, los niveles de los embalses en estas regiones cayeron por debajo del 29% de su capacidad. Como referencia, los niveles estuvieron cerca del 50% en 2020 y cerca del 45% en 2019.
Como consecuencia de la menor generación hidroeléctrica, Brasil se ha visto obligado a depender más de sus plantas de energía a gas, aumentando su dependencia de las importaciones de GNL para satisfacer la demanda por encima de su propia producción y disminuyendo las importaciones de gasoductos desde Bolivia, indicó Platts.
En los últimos meses, Petrobras, que generalmente compra cargamentos de GNL en el mercado spot, ha estado adquiriendo cargamentos activamente para satisfacer su demanda interna.
La gran mayoría de las importaciones brasileñas provienen de EE. UU.. En 2020, Brasil se convirtió en el centro de demanda para los cargamentos de GNL estadounidense, desplazando a México como el primer importador y/o destino del GNL estadounidense en América Latina y el Caribe.
Alta demanda coincide con los altos Precios del GNL Spot
En momentos donde la demanda de GNL ha registrado una corrida alcista y los precios spot del GNL a nivel mundial alcanzan máximos para la temporada, Brasil se ha visto obligado a competir con los principales compradores de Asia y Europa por los cargamentos de origen atlántico.
El marcador de la costa del golfo de Platts, que rastrea el valor de una costa del golfo de EE. UU. (FOB), alcanzó un máximo histórico de USD 11,90 / MMBtu el 5 de julio, lo que refleja tanto la fuerte demanda fundamental de Asia como la creciente competencia de precios de Europa.
Sin embargo, el apetito de Brasil por los cargamentos no parece verse afectado por los altos precios.
De acuerdo con Platts, el interés de compra de los cargamentos DES a Brasil para la entrega inmediata se escuchó más recientemente en alrededor de una prima de $ 0,30 / MMBtu al TTF.
Argentina
Las importaciones de Argentina también han aumentado debido a que la producción nacional de gas y las importaciones de Bolivia han resultado insuficientes para satisfacer la demanda proyectada para el invierno en el hemisferio sur.
Las complicaciones de producción causadas por la pandemia mundial y los precios aguas abajo insuficientemente atractivos han obstaculizado los flujos de gas del enorme potencial del gas de esquisto de Vaca Muerta en el centro del país.
Argentina ha tomado medidas extraordinarias para incrementar la cantidad de GNL que se puede importar durante los meses de invierno, re-fletando a corto plazo la unidad flotante de almacenamiento y regasificación (FSRU) que antes operaba en Bahía Blanca.
En lo que va de 2021, el país ha emitido cinco licitaciones de compra con casi 60 cargamentos (parciales y de tamaño completo).
Las entregas de las licitaciones anteriores comenzaron en serio en mayo y casi se duplicaron en junio para llegar a poco más de 25 Bcf por mes. Esto representa el mes más alto de importaciones registrado desde agosto de 2018.
La más reciente de las licitaciones se cerró el pasado 6 de julio y buscaba un total de cuatro cargamentos parciales para su entrega en la terminal de Escobar para los meses de agosto y septiembre. Se escuchó que la participación en la licitación fue sólida, con seis al menos casas comerciales que presentaron ofertas.
Es probable que el precio de esta última licitación también se vea afectado por la reciente subida de los precios del GNL, con una prima adicional cobrada por la logística menos favorable involucrada en la entrega de cargamentos parciales.
Fuente: S&P Global Platts